Publicado : 2021-10-26 14:33:04
Categorías : Welcome Lover
El sexo tántrico favorece el tacto cargado de mucha sensualidad, el compartir y la complicidad con la pareja, devaluando el orgasmo inmediato, a diferencia de lo que ocurre con el sexo tradicional. La idea es prolongar la duración del placer tanto como sea posible y sentir más al otro.
Aquí están nuestras mejores sugerencias.
Para empezar, nada mejor que enfrentarse a su pareja, intercambiar miradas cariñosas y apasionadas, los intercambios de palabras cariñosos también son bienvenidos y los cumplidos son imprescindibles. Poco a poco, toca suavemente el cuerpo del otro y acaricia todas las zonas erógenas a medida que aumenta la excitación.
En el momento de la penetración, el pene no debe estar completamente insertado. Lo ideal es empezar pequeño y penetrar solo con el glande, realizando movimientos lentos para estimular a ambos. A medida que avanza el sexo, pueden tomar descansos de la penetración para estimular al otro de diferentes maneras. Usa tus buenas manos o lo que te dicte la creatividad.
Un paso importante durante la penetración en el sexo tántrico es la penetración profunda. La mujer se sienta en forma de V mientras abre las piernas y el hombre la penetra profundamente, pero sin movimientos bruscos ni “ir y venir”. La mujer puede contraer los músculos de la vagina para aumentar la estimulación de ambos.
Esta práctica sexual trae una conexión única entre socios. Así que no intentes apresurar nada y disfruta de la experiencia. El ambiente debe ser limpio y silencioso. Haz que tu pareja se sienta cómoda y cómoda con la situación. Incienso, velas, flores y frutas son buenas opciones para mejorar el medio ambiente y ayudarlo a relajarse.
Recuerda que la idea final es el orgasmo, pero los pasos hay que disfrutarlos con mucha ilusión hasta llegar al resultado esperado. Incluso porque la intención no es el sexo común o salvaje, sino la conexión entre parejas.
El sexo tántrico implica muchas cosas, pero la principal es el masaje. Usa tus manos, boca, brazos, piernas, todo, pero siempre con cariño. El masaje es el recurso principal, por lo que abusa de los aceites y cremas de masaje. Explore las partes del cuerpo de la otra persona que nunca pensó en tocar para explorar nuevas formas de placer.
¡Seguro que has oído hablar de él! Pero si no sabes de qué se trata, te lo explicamos. El pompoarismo o kegel es una técnica utilizada por mujeres (u hombres) para tensar los músculos de la vagina (o pene). Esta técnica hace que la mujer mueva los músculos de la vagina sin mover el cuerpo.
Esta técnica también se utiliza mucho para la estimulación femenina y masculina durante el sexo tántrico, antes, durante o después de la penetración.
Para las mujeres hay algunas áreas que son puntos de placer. Por supuesto, para cada uno puede diferir, pero en general, son puntos en común.
Cabello: Tirar con firmeza se siente placentero.
Oídos: Se recomienda tocar o susurrar.
Cuello: ¡Zona erógena y escalofriante!
Muslos: En el interior, la sensibilidad aumenta cuanto más cerca estás de la vagina.
Pezones: Los senos y los pezones son puntos de gran sensibilidad para la mujer. ¿Qué tal usar algún ACCESORIO para la estimulación?
Vagina y clítoris: obviamente, ¿no es así?
Hay tantos como los suyos y también necesitan ser explorados.
Nuca: ¡Punto de piel de gallina!
Labio inferior: Lleno de terminaciones nerviosas y muy placentero.
Cuello: al igual que para ellos, una zona erógena de gran placer.
Muslos: Al igual que para ellos, cuanto más cerca del pene, más estimulantes.
Pezones: Sensibles como los de las mujeres y un gran punto de estimulación.
Entrepierna: Obviamente, ¿no?
Entendemos que el perineo y la próstata siguen siendo temas tabú para los hombres heterosexuales, pero son puntos que deben explorarse. El placer es el placer, así que déjalo ir y pruébalo.